• En un bowl, agregar los garbanzos escurridos, el ajo picado, la mostaza, paprika, salsa negra, aceite de oliva y caldo rico. Dejar de lado. 

Para el pimentón:

• En un fogón a fuego alto, colocar el pimentón a fuego directo hasta que su piel se carbonice completamente. Ir girando con ayuda de pinzas. Cuando esté completamente negro, colocar dentro de una bolsa y dejar reposar 5-10m.
• En una olla mediana, agregar un poco de aceite y cocinar la cebolla blanca a fuego medio bajo por 5m. 
• Agregar los garbanzos y dejar cocinar 5-10m para que las especies se tuesten y liberen su aroma. 
•  Agregar 2-3 tazas de agua hasta que los garbanzos estén completamente sumergidos y tapar.
• Dejar cocinar a fuego bajo por 30m.
• Pasar el pimentón rojo por agua, retirando toda la piel carbonizada y cortar en cubos. Agregar al la mezcla de garbanzos. 
• En un bowl pequeño, diluir la harina de trigo en un poco de agua, agregar a los garbanzos. Probar y rectificar punto de sal. Subir fuego a medio alto y permitir que se evapore el exceso de agua de ser necesario.

Este plato siempre lo acompañan con una variedad de guarniciones: arroz blanco, aguacate, uva pasa, jamón, tocineta, coco, papitas fritas, alcaparras, maíz, mejor dicho la lista sigue y sigue. La idea es uno formar su propia combinación de sabores. Yo le agregue plátano maduro a la mezcla para un toque dulce.